(EFE).- Tras su ajustada victoria en Iowa, el exgobernador de Massachusetts Mitt
Romney se apuntó hoy un nuevo tanto al lograr el respaldo del senador
John McCain, que en 2008 le arrebató la candidatura republicana a la
Presidencia de EE UU.
Desde Nuevo Hampshire, próximo estado que celebrará primarias republicanas el
próximo martes, McCain dijo que Romney “es el presidente que volverá a hacer
grande a Estados Unidos” y el aspirante republicano que puede enderezar el rumbo
dado al país por Barack Obama.
“Obama puede correr, pero no puede esconderse por destruir nuestra
nación y haberla llevado a la quiebra”, indicó McCain, flanqueado por
Romney y un grupo de sus simpatizantes.
El antiguo candidato presidencial aseguró que la economía será el gran tema
de campaña y que con Romney los republicanos recuperarán el control de las dos
cámaras del Congreso, para lo que pidió el compromiso de los que aún no se han
decidido.
McCain viajará con Romney en su autobús de campaña por Nuevo Hampshire, donde
el 10 de enero se volverá a jugar su apoyo ante los votantes
republicanos tras la ajustada ventaja de ayer en las primarias de
Iowa.
En 2008, la victoria de McCain precisamente en Nuevo Hampshire disminuyó
considerablemente las opciones de Romney de lograr la nominación republicana. El
senador también había logrado imponerse en el estado en 2000, por encima del
expresidente George W. Bush.
Su apoyo supone, por tanto, un impulso en la segunda cita electoral
para Romney, que se impuso en los caucus de Iowa por un margen de
apenas 8 votos sobre el exsenador Rick Santorum y que, a nivel nacional, es
considerado el gran favorito de la carrera.
Romney acumulará así el apoyo de tres de los cuatro candidatos republicanos
que aún viven: McCain, el expresidente George H. Bush, y Bob Dole, que perdió
las elecciones de 1996 contra Bill Clinton; a falta de que George W. Bush se
decida por un candidato.
El exgobernador por Massachusetts también obtuvo en octubre el apoyo
del gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, una importante fuerza
ideológica del partido a quien muchos animaron a competir por la
Presidencia.
Además, ha logrado el apoyo de dos legisladores republicanos por
Nuevo Hampshire, la senadora Kelly Ayotte y el congresista Charlie
Bass, lo que le promete buenas opciones en el estado.