Diego Arria, quien fuera embajador de Venezuela ante la ONU, junto al Movimiento Un Mundo Sin Mordaza se acercaron a la Embajada de Libia en Caracas para consignar una misiva en apoyo al pueblo libio y en rechazo a apoyo manifiesto del presidente Hugo Chávez y su gabinete ejecutivo, al líder libio Muamar Gadafi. La carta no fue recibida y fue dejada debajo de la puerta de la sede diplomática.
En el lugar se presentó un grupo de personas para manifestar apoyo al pueblo árabe. Efectivos de la PNB estuvieron en el lugar para resguardar la embajada
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